27 de abril de 2020

ADICIONES TECNOLÓGICAS Y ASUNTOS VARIOS

Los que tenemos hijos observamos con el rabillo del ojo su devenir durante el confinamiento. Aquí, con ¨hijos¨, se incluye femenino y masculino como nuestra lengua indica. Y por eso, cuando estudiamos lengua española, también nos pasa a los del noroeste como en galego, lo propio de las lenguas indoeuropeas como el latín, estudiamos tres géneros: el masculino, el femenino y el neutro que con este último se identifica a los dos, así que siguiendo las recomendaciones, muy acertadas a mi entender, de la RAE dejaré de usar ese lenguaje que alguien se ha inventado creyendo que por eso defiende más y mejor a las mujeres, sórdida estupidez como indican los que saben, que no soy yo. Y así va por todos, nuestros hijos, hombres, mujeres y los que se sienten como cada uno sea.

Recuerdo en mi niñez los juegos en la calle, en el patio del colegio, pocas llamadas telefónicas porque todos los que en aquel momento se encontraban en casa eran partícipes de la conversación.. Aquel teléfono anclado a la pared en el salón o en el dormitorio de nuestros padres, sin privacidad ni intimidad. Una época en la que el televisor era el gran aliado pero había que verlo poco porque era el enemigo de los niños según nos decían y un rato estaba bien, pero poco más y con una censura reflejada con los rombos que indicaba que no te tocaba seguir allí o ante una escena que comenzaba a subir de tono había un apagón, o un desalojo inmediato de nuestra zona de confort familiar..

¿Ha sido un tiempo mejor? no lo creo, sólo diferente. La opinión de los menores poco se escuchaba, o se respetaba, había una estructura claramente piramidal, siendo el extremo del iceberg los de mayor edad y cuando más te acercabas a la base de la misma, más alejado de poder optar a alguna capacidad de decisión. Tampoco pretendo con este artículo hacer una comparativa sobre lo que vivimos nosotros cuando éramos niños de lo que viven a día de hoy nuestros hijos, porque el contexto del siglo XXI, poco tiene que ver con el del siglo pasado, especialmente en lo que se refiere a relaciones paterno filiales, donde hoy hay una lucha implícita a ver quién le da más y mejor y así tenemos auténticos emperadores y emperatrices (aquí sí me parece importante remarcar)y unos padres helicóptero con la sobreprotección como bandera. Pero lo que es una realidad es el cambio de modo de vida para nosotros y nuestros hijos, la revolución tecnológica está presente y es el futuro y todo el que se pare, se quedará atrás y el que se proponga ir contra ella no podrá.


Ahora que estamos recluidos percibimos que habrá un cambio en la arcaica cultura de la presencia, por fin..Se puede estudiar y formarse a través de la red y así lo hacen, sus juegos son online, el cine, la música, la cultura, sus relaciones sociales son permanentes y el conocimiento acerca del otro es devastador, sin intimidad, con una exposición constante, aceptada y valorada positivamente. Cuando salen están juntos, en el colegio o el instituto están en contacto y cuando llegan a sus casas siguen unidos, mucho más de lo que nosotros lo estábamos, no están encerrados en sus habitaciones , no son raros, ni seres asociales, son niños y adolescentes con la misma problemática de la edad, que achacamos a lo digital cuando es comportamental: cambios de humor, alteraciones del estado de ánimo, irritabilidad, dificultad en sus habilidades sociales, falta de empatía..Todas ellas características de la idiosincrasia de la pubertad y de los menores sin límites..Fomentamos las TICs, el uso de las redes, de las nuevas tecnologías, la formación STEM fundamental para las mujeres que según dicen los expertos se quedan muy atrás. Lo que viene está en la nube, pero ellos siguen siendo los mismos, chavales que necesitan orden, normas, disciplina y convivir en familia. Yo te animo a buscar espacios para engancharlos con juegos de mesa que les gusten, hacer un bizcocho, un puzzle, pintar con acuarelas, rotuladores, busca huecos para estar cerca y una vez que los encuentres, no los sueltes.

Las profesiones con más futuro son la ingeniería del software, especialista en inteligencia artificial, ingeniería de robótica, desarrollador de Big Data,....Demonizamos, atacamos y peleamos contra este devenir sin darnos cuenta que es su vida y es la nuestra y es nuestro presente y será el futuro. No hay límites, no hay censuras, es imparable y toda la responsabilidad la ejecuta quien debe hacerlo, la familia. Ese ente todopoderoso que es y debe guiar el camino. Fomentas pero criticas, animas pero le gritas, incentivas pero coartas...Debemos hacer un giro copernicano, porque si no nos sumamos, si no nos introducimos y si seguimos mostrando ese hipócrita rechazo frontal ante ellos, sólo conseguiremos alejarnos de la realidad que tenemos delante de nuestros hijos y a pretender que vivan nuestra realidad analógica, cuando la suya es digital desde su nacimiento.

Nos encontramos antes un escenario VUCA, que sitúa el presente y el futuro en la volatilidad, la incertibumbre,  la complejidad  y la  ambiguedad. Pero sí hay un horizonte muy bien definido al que debemos sumarnos, e ir de la mano con él, es el de nuestra generación Z, conócela, quiérela y disfrútala. 

2 comentarios:

  1. Artículo, acertado en toda su extensión; no se deben poner barreras al progreso y, aún si alguien lo intentase, sería arrollado por ese cambio que se nos viene encima como una locomotora a toda velocidad.
    Magnifico artículo, certero, además... breve, claro y directo. Eres grande y observas con claridad las cosas y eso te hace grande

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